sábado, 31 de enero de 2009

Bienvenidos a la espiral de retales de vidas...

Vas enlazando palabras, palabras que te conducen a espacios, espacios donde vive gente, gente que oculta lo que piensa, mientras piensa que no debe desnudarse. Ropa que cae toda enredada, enredos en mi pelo de frambuesa, fresas que crujen en mi boca, boca sellada por tus labios, labios que recorren mis anhelos, anhelos que en la niebla forman fantasmas, fantasmas que hacen que ocultemos, las palabras que la gente va enlazando.

lunes, 26 de enero de 2009

Inquilino 1º B

"Ve y recupera tu dignidad, hijo", me dijo una vez mi santa madre.

Y eso hice, porque la única forma de recuperar mi dignidad perdida era esa: arrebatársela a aquellos que no la merecían.

domingo, 25 de enero de 2009

La primera impresión...

"Apaga esa luz, no me dejas descansar", fue lo primero que me dijo.

Tenía unos cincuenta años, cuarenta y siete, le calculé yo, canas en las sienes, y una incipiente barba no sé si por descuido o por desidia. Estaba cómodamente sentado en mi mecedora (está rota, no te sientes ahí!!!), acogedoramente tapado con una manta de vaca y con un vaso de whiskey con hielos en su mano derecha.

"¿Ese es mi Jameson?"

"Por todos los demonios, niña, ¿cómo se te ocurrió guardarlo en ese armario? ¡Se puede pudrir! Putas nuevas generaciones, ¿qué coño os enseñan en la escuela si no sabéis ni conservar un buen whiskey?"

Su voz rasgada se perdió en el cuello de la camisa mientras pasaba una hoja más del libro con su dedo índice. Tenía los nudillos cubiertos por un escaso vello negruzco, y la piel de sus manos estaba ajada y oscura. No supe si era suciedad, o tal vez su tono natural, aunque tampoco tenía claro si quería conocer la respuesta.

Con suavidad dejé la maleta del ordenador en el suelo, apoyada sobre el armario para que no se golpeara y me acerqué al espejo. La superficie estaba dura, no podía haber salido de allí; pero el hombre estaba calmado y aparentemente cómodo en mi habitación. Pestañeé, una, dos, tres veces, hasta que, molesto, levantó la mirada y cerró el libro, no sin antes marcar dónde se había quedado con un semiborrado ticket del Día.

"¿A qué estás esperando, tú no tienes que estudiar o qué? Vamos, no tienes todo el día..."

Asentí en silencio y coloqué el ordenador sobre el desordenado escritorio. El individuo me miró de reojo y continuó con su lectura. Suspiré resignada y saqué mis apuntes.

Con un lapicero en la mano, comencé a escribir.

viernes, 23 de enero de 2009

Dr. dixit (ide)

Dicen que cada vez que aprendemos una cosa nueva, olvidamos algo que ya sabíamos.
La próxima vez que tenga que olvidar algo, quiero olvidar a abrir las puertas. Total, con la puerta de la cocina no me sirve de nada. Aunque es cierto que hace mucho que no la abro con la cabeza....mmm...¿influirá que ya no me tiño?
Cuanto más te esfuerces en algo, cuanto más trates de aferrarlo, con tanta más fuerza se te escapará.
Porque no solo de pan vive el hombre, y con jamón y tomate está rico. Por una vida más dulce, Leche merengada MariPili, hecha en casa.
=)
P.D.: Jito, no estoy tan fuckin the world, es solo un poco. Pero pega con Manowar y sus pollas aladas que, tal vez este año, llevemos puestas =)

Un viaje inesperado...

Ahora que se ha pasado la emoción del momento, ahora que la euforia de la novedad se ha ido, efímera, como llegó, ahora es el momento de reflexionar, de hablar sobre lo que no se ha hablado, de escribir desde la sinceridad de una ficción; es el momento de abrir los ojos de verdad, apartar lo supérfluo, lo que no aporta nada y meditar.
¿Qué es lo que me sobra? Definitivamente, la locura no. En medio de este mundo que cada día parece más esperpéntico y deplorable, un poco de locura diaria es lo que nos ayuda a seguir sin cometer una estupidez mayúscula.
¿La pasión? De ninguna de las maneras. Si quieres escribir (y no digo ser escritor, que ahí entran cosas como las que los viejos de ayer no entienden, el márketin, la publicidad engañosa, pasear por debajo de las mesas...), hay que tener una cierta dosis de pasión. El proceso de creación literaria, a pesar de lo que puedan creer / opinar algunos, y al menos para mí así lo es, requiere ese enganche apasionado y sentimental que te haga sentarte a escribir y a contar lo que tus personajes te piden, por favor y educadamente, que relates. No es ninguna enfermedad, no, a pesar de que muchas veces se cure también en la cama. Pero ese, a veces, es la causa y solución de todos nuestros problemas. Así, no puedo olvidar la pasión, en tanto que es el combustible que alimenta mi máquina de hacer relatos, pero tampoco puedo dejar a un lado la técnica, que es el motor que permite que esto funcione. Sería una estupidez pretender escribir una obra de arte sin saber gramática, o sin saber cómo funciona tu lengua, así como sería frívolo (y la obra resultaría, con ello, fría y aséptica) escribir como si tuvieras un taller de ebanistería (cítome, pues de esto hablaré otro día). Oseasedeverdad, que la pasión no sobra.
¿Tal vez unos kilos? Bueno, esto sería discutible, pero viendo las bajísimas temperaturas que hace últimamente, creo que una capita de grasa nunca vendrá mal para protegerse del gélido Invierno. Y volvemos a lo de siempre. Ahora y en el futuro me seguirá gustando más un valle profundo en el que perderse, antes que una plana llanura con dos mini cerros. Con lo cual, los kilos nada, se quedan.
¿La coherencia interna y lógica? ¿La demasiada planificación? Hay quien diría que mi vida está demasiado organizada de antemano, a pesar de que a veces a mí me parezca bastante ilógica. Ha sido el paso lógico, he vivido un día a día durante mucho tiempo, he vivido sin saber qué haría al momento siguiente, pero he recuperado el rumbo, la estabilidad, y muchas cosas que no sabía que había perdido por el camino, y que echaba de menos sin conocer. En ocasiones creemos conocernos, creemos saber lo que nos gusta, lo que necesitamos, y creemos que somos dueños absolutos de nuestra vida interior. ¿Seguro? ¿Te conoces tan bien como para decir que mañana no abrirás los ojos a un mundo nuevo para descubrir que había algo que te faltaba, tan necesario como una mano, un brazo o un pie?
Voy a invertir el ultraconocido tópico de No nos damos cuenta de lo que queremos algo hasta que nos falta, para decir lo que ya he dicho, y desdecir lo que no he expresado todavía. Llega un momento en la vida de toda persona en que ha de decidir cosas importantes de su vida: crecer o ser pequeño; perder o conservar la inocencia; chocolate blanco o chocolate negro; ciencias o letras; chico o chica; rojo, amarillo, negro o azul; creer o no creer en la lista de los 40 Principales; chino o turco...
Toda decisión en nuestra vida es importante, aunque muchas de las cuales se tomen una tarde de verano, sentado en un parque, mientras comes un bollicao (pero de los viejos, de los que llevaban cromo; todavía recuerdo los mejores, que tenían la mitad del relleno blanco y la otra mitad negro). Cuanto mayor te haces, tanto más difícil te resulta decidir, aunque sabes que no hay opción de eludir a la Parca.
Y ahora, habiendo perdido el hilo de la narración (¿de verdad?), y teniendo copiados ya los cuarenta y cuatro remedios que Plinio propone procedentes de los tres tipos de mostaza, voy a sonreír, y voy a pensar que, como siempre, muy poca gente leerá esto, y mucha menos lo entenderá. Comentarios, no los espero demasiado. Los que tengo, provienen de la locura, y esta, como debe ser, no atiende a razonamientos lógicos. Tendréis que perdonarla, es un poco tímida, y no quiere salir a saludar.
Me da un poco de reparo lanzarme a literar en este espacio. Ya lo he hecho una vez, pero seré capaz de repetirlo? ¿O acaso es que he vuelto la mirada a mi interior, me he puesto la lente de la intimidad, y he cambiado? No lo creo pero, hasta que lo compruebe, reflexión teórica y praxis, como diría el amigo Arist., que, de momento, ya ha tenido lo suyo.

miércoles, 21 de enero de 2009

La lechuga salvaje contraataca...

Ante la más absoluta imposibilidad de poner una puñetera encuesta en el margen, y ante la más absurda de las estupideces, que me impide poner una sencilla lista de enlaces, me va a dar bastante por c*** (por si las moscas, quiero decir, por si los menores de edad nos visitaran) intentarlo otra vez. Seguiré, seguiré intentándolo, porque la encuesta era genial (!!), pero me estoy empezando a calentar...

Entre otras cosas, los últimos días he llegado a varias conclusiones que voy a proceder a exponer:
  • He decidido manifestar públicamente mi estado mental: loca. Quiero decir, no es nada nuevo, pero ahora es púbico y oficial.
  • Soy una lechuga salvaje. Esto no tiene explicación.
  • Tengo extremada mala suerte con la inmensa mayoría de las cosas, asunto que pasaré a tratar en profundidad cuando acabe con esta lista (cómo molan las listas).
  • Soy capaz de estudiar un examen, aun cuando falte casi un mes para él; empero al segundo día perderé toda concentración, ayudada por la necesidad de copiar 100 entradas de diferentes páginas de la web.
  • Las lechugas salvajes no tienen bichos.
  • Si me pongo una toalla en la cabeza con el pelo mojado, se riza. Mucho. Pero no hasta ser una escarola, todavía no he cambiado de raza, estamos trabajando en ello.
  • Los primates se están extendiendo por el mundo. Ya hay varios lugares donde comienzo a tener ganas de estrangular a gente, a saber: conduciendo (o siendo conducida), en el autobús (sobre todo acompañada de ciertos especímenes vecinos de barrio a los que siento escandalosas ganas de descuartizar), generalmente en clase, cuando pierdo al buscaminas, etc.
  • La comida que no te gustaba de pequeño puede volver a gustarte de mayor, es solo cuestión de probarla y añadirle roquefort.
  • La lechuga salvaje no se come, a partir de ahora está protegida. Solo se comerá si previamente se ha domado.
  • Me gusta hacer listas.
  • La expresión "darse el filete" viene del griego philetao, según lo dicho en clase ayer.

Voy a dejar la lista, aunque creo que me faltan muchas más cosas, porque hay algo más interesante que debo contar. Qué ha pasado con mi último (penúltimo) trabajo. Procedamos a explicar desde el principio.

Digamos que tengo que hacer un trabajo sobre un libro elegido de una obra que tiene 37 libros, y he elegido el 20. Digamos que voy a buscar en la biblioteca de la Universidad una edición que contenga texto y traducción, dado que la alemana solo tiene en latín. Digamos que la colección inglesa está en dicha Universidad, todos los volúmenes, excepto el 6. Adivinad qué libro de los 37 contiene el volumen 6. :)

Digamos también que hay una traducción en castellano de libros elegidos. Adivinad qué libro no está traducido. :)

Por último, adivinad quién lleva toda la tarde copiando la traducción en inglés de una página de internet (100 capítulos, uno en cada página, que tardan mil en cargar), porque hace cuatro años que no da francés.

Espera, ¿qué oigo? ¿Yo? Me hercle, no puede ser, ¿cómo voy a tener yo taaaan mala suerte?

Pero lo bueno, he ganado dos días casi seguidos al buscaminas, pero en plan paliza. Acaso vuelve a mí??

[Y un regalito:]

Edit: no hay regalito, que los poemillas guarros han desaparecido xD

P.D.: Feliz día Universal del Tocamiento (fue ayer).

jueves, 15 de enero de 2009

Receta para hacer un buen comentario para niños...

Ingredientes:

- Un poco de humor.
- Mucha imaginación.
- No haberse leído el libro, eso es muy importante.
- Tener que entregarlo al día siguiente.

Preparación:

Sufrir la presión de una hermana pequeña, escuchar música turbia para inspirarse, mezclar el humor con la imaginación, y ponerlo a cocer con una pizca de sal. El desconocimiento del tema es imprescindible para hacerlo.

Añada una cucharada de información de Internet, agite bien y sonría.

Slice of life, Comptine d'un autre été.

Yo, como la oscuridad, soy una puta mentirosa; y donde dije digo, digo pastel de manzana. Y hago lo que a mí me da la gana. Y la maté porque era mía. Pero es hora de confesar:
Sé que siempre he tenido muy pocos lectores; sé que os importa un comino (o menos, que las especias están muy caras) lo que os cuento; sé que soy una más en esta "blogosfera", donde cada cual tiene algo más interesante de contar que el anterior; sé que muchos han mostrado un falso interés por copromiso, en tanto nos conocíamos, había "amistad" o amistades comunes, o por el llamado "buenrollismo".
No sé si habrá alguien al menos a quien le interese de verdad lo que escribo, quiero (y debo) pensar que sí, aunque me parece que es mejor escribir para mí, o para aquellos de los que hablo (mis personajes, que me lo dan todo), porque es lo único seguro en este mundo de inseguridad.
He querido, he protegido, me he preocupado por gente que ha demostrado no conocerme; he tratado de agradar a quien no se lo merece, queriendo que hubiera equilibrio en el mundo y que todos recibieran lo mejor; he luchado infructuosamente por hacer que cierta gente se diera cuenta de que con lo que hacían no iban a ninguna parte. Y nada ha funcionado.
Bueno, y qué? Me da lo mismo, yo soy yo, soy yo y yo soy yo misma. No necesito la confirmación de nadie para saber que existo, tengo mi propio multiverso donde creo y me recreo en mis creaciones, donde puedo sonreír cuando hago bromas, que sé que me gustarár, que a lo mejor solo yo puedo entender, cosas que el resto no entenderían porque no son más que astrúpidos astrágalos sordos. Y algunos calvos. Pero no me importa.
He llegado a un momento en mi vida en que soy mayor, y soy pequeña, en que estoy triste, y a la vez feliz (MUY feliz), ha llegado un momento en que sé hacer comida salada y comida dulce, en que sé hacer llorar y hacer reír. Pero sobre todo, ha finalizado una etapa en mi vida. Me he dado cuenta no hace mucho, cuando hace casi un año de ello. Me da un poquito de pena despedirme, pero hay que seguir avanzando, dar un paso más.
Quien se interesaba, ya lo ha leído. Quien no, da lo mismo. No se pierden nada, y dudo que les interesara de todos modos. He cerrado mi blog. C'est fini, es ist geschlossen, closed. Y esta vez dudo que vuelva, al menos de momento. Tengo mucho, mucho que decir, no hay más que ver la absurda verborrea que suelto en este nuevo tablón, donde cuelgo las idas de pinza, la ira, los odios odiosos que odian a odiosas "personas". Y con eso me es suficiente.
Sigo teniendo mis escritos y mis secretos, y los guardo fuera de aquí, pero esto ya no sirve. Se ha acabado el momento, y la historia que había empezado tal vez no deba contarla ahí. Es algo diferente, distinto, y no sé si quiero compartirlo con los demás. De momento, este es mi único blog, y así será.
Y ya, que me enrrollo como las persianas, escribiendo geminadas, y dándole vueltas a un asunto harto trillado. Así queda, que os cunda mucho a todos. Por supuesto que acepto opiniones y sugerencias, pero sé que escribirá Pablo, Sergio, y Ana, si la amenazo correctamente. Por lo demás, Frieden, Freude, Sachertorte.

Efímera gloria...

No ha llegado a la semana. Como diría Pablo, la suerte es una puta caprichosa; añado: sobre todo, puta. Mi particular Calvario lo estoy viviendo con el ordenador que me ha tocado en suerte. Es la tercera vez que lo voy a tener que mandar a arreglar. Y esta vez ha tardado exactamente 6 días en estropearse.
Pero voy a empezar por el principio. Por mi cumpleaños, en agosto, me regalaron un ordenador y un mp4. Fue comenzar el curso, y fallaron ambos en la pantalla. Las dos (putas) fallaban, se quedaban en blanco y no funcionaban. Así, los mandaron a arreglar, dejándome sin ordenador (con el que copio los apuntes). El mp4 me lo cambiaron por otro. Cuál no sería mi sorpresa al abrirlo, cuando me encontré un disco de Mago de Oz (grupo repulsivo, por otro lado) perfectamente grabado dentro. Desde mi humilde conocimiento yo pensaba que venían en blanco. Así dedujimos que, además de estar usado, tenía varias teclas defectuosas. Lo devolvieron, y me trajeron uno que, ¡oh, sorpresa!, no tenía cargador.
Pese a ello, lo cierto es que es el que mejor ha salido, aunque la batería funcione algo peor. Pero eso no fue todo. Me devolvieron mi portatil, y yo feliz y contenta. Pero era una efímera alegría, pues pronto volvería a fallar.
El último día de las vacaciones de navidad, mi portatil volvió a ser enviado al puto servicio técnico que, mucho tiempo después, me lo devolvió teóricamente arreglado. Y ha tardado seis días en volver a dar el mismo fallo, esta vez cuadruplicado.
En fin, parece que estoy acumulando toda la mala suerte que debía tocar a Valladolid durante este año. No os preocupéis, convecinos, estoy aquí para protegeros.
Y, sí, esta racha de mala suerte se extiende al buscaminas, donde he perdido la supremacía que hasta ahora ostentaba. Ya no soy la que era, ya no veo tan bien, me he hecho mayor. Miro hacia atrás con nostalgia y cariño, aquellas tardes en las que era capaz de encontrar al azar seis minas seguidas, con un tablero totalmente en blanco. Pero bueno, todo fluye, panta rei, como diría Heráclito, y nada permanece. Al menos sé que puedo hacer tarta de chocolate para consolarme.

miércoles, 14 de enero de 2009

Ausonia te cuenta o compresología variada...

Lo cierto es que la gente no se suele parar a leer muchas de las cosas con las que nos topamos día a día. Mi problema es que lo hago: carteles, panfletos de publicidad, esquelas, propaganda del día, periódicos, libros ajenos (eso es más problema) y muchos otros textos que me atacan cuando estoy por la calle (o donde sea).

Lo que os voy a transmitir hoy son los textos con los que los (noséqué) de Ausonia han tenido a bien ilustrar nuestro conocimiento, unos minitextos en la pegatina de las compresas con alas. Como si las mujeres en esos días en que están:
a) de mala leche (MUY mala leche),
b) doloridas,
c) y, parodiando al Reno Renardo, hasta la polla,
fuesen a leerlos.

Pero yo sí, es mi particular enfermedad. Y dicen:

El síndrome premenstrual puede conllevar trastornos gastrointestinales (sí, claro, que no sabes si cagas o meas, muy bien, danos ánimos...).
El síndrome premenstrual puede conllevar hinchazón abdominal y de los pechos (anda, entonces no me han hecho la estética por la noche, es que me crecen con la regla, quién lo iba a decir... Y, umm..., hinchazón abdominal? ¿Alquien quiere unas paredes pintadas de rojo?)
Un 37% de las mujeres dicen sufrir molestias severas durante la regla ("dicen", bah, se lo están inventando, seguro).

Curioso, ¿verdad? Después de leer cosas como estas, y darte cuenta de la poca imaginación que demuestran (las mismas construcciones, qué originalidad), no sabes si reír, llorar, o dejar de leer las compresas. Al fin y al cabo, para lo que sirven...

A todo esto, pensaba hacer una entrada más elaborada, pero otro de mis GRANDES problemas, con mayúsculas, negrita, y si pudiera también con lucecitas, es el pu*~ buscaminas. Y en este mismo momento me están ganando, porque he abierto sin querer dos puñeteras zonas... Efectivamente, acabo de perder :)

Divertido, lo de las compresas, eh? Otro día más. Y más manías. Y más enfermedades. Y magdalenas con vainilla. Y trilorgías varias.

Ley de transposición de bitácoras

Postulada por Ricardo Galli, esta ley sobre bitácoras afirma que "Mientras más complejo es el tema, mayor es la posibilidad de que haya respuestas sin ningún tipo de análisis". La constante es que "la rigurosidad de los comentarios es inversamente proporcional a la complejidad del tema presentado".
Fragmento del blog de Manuel Vilas, http://manuelvilas.blogspot.com

10.46, 1º hora de clase

Está en un hospital una mujer dando a luz, cuando, en medio del parto, esta muere. Al mismo tiempo, llegaba un cura con unos grandes dolores de vientre. Los médicos, preocupados por el niño, deciden que le van a decir al cura que el hijo es suyo. Al llegar al pueblo, el cura presenta al niño como suyo.
Pasan los años, y, en el lecho de muerte, el cura llama al hijo:
- Hijo mío, tengo que revelarte algo...
- Lo sé, no hace falta que digas más. Eres mi padre...
- No, hijo, yo soy tu madre; tu padre es el arzobispo de Cuenca...

domingo, 11 de enero de 2009

Cuando la realidad supera a la ficción II

Hace un rato re-publicaba entradas que escribí hace meses, asombrándose de lo al día que pueden llegar a estar. No diré que eran premonitorias, porque es algo largo, que sabíamos que duraría, y que no podía mejorar. De manera que solo añadiré: seguimos igual (statu quo).
Y hoy, mientras releía Cuando la realidad supera a la ficción, ha vuelto a suceder. Diréis: bueno, pero ya sabíais que esto sucedería, sabíais cómo estaba el asunto, ibais sobre aviso. Sí, claro, siempre sabes cómo está el asunto, pero eso no quita para que te sigas sorprendiendo. Todos los días amanece, siempre que llueve y hay sol (sale la vieja a hacer el requesón) aparece el arcoíris. Pero aun así, seguimos sorpendiéndonos.
Que de qué hablo? Ah, bueno, eso es más complicado de explicar, pero enlaza con mis entradas sobre la estupidez humana y anteriores reflexiones similares. ¿Hasta dónde es capaz de sorprender un homínido mostrando su soberbia subnormalidad? Hasta el infinito.
Pero abandonemos el tema, es algo que no acompaña demasiado para hacer redacciones germánicas. Hoy la sorpresa viene de la mano de la gente (así, como grupúsculo profano), que se las dan de modernos y tolerantes, de artistas, alternativos, de esos que ven una mierda en un bote y comprenden que hace una clara referencia a la opresión del gigante del consumismo y nuestra libertad cohartada, viene de mano de algunos que se piensan que son mayores, inteligentes, incomprendidos, casi genios, mentes preclaras que pretenden ser lo que no son.
¿Que yo qué me creo? ¿Que qué me pienso que soy? Una maldita rubia conservadora harta de vosotros :) Ni soy más inteligente, ni mejor, ni más madura. Soy lo que soy en este momento, lo asumo y lo comprendo, y conozco mis limitaciones. Y critico vuestros actos porque yo no los cometo (o los cometí cuando la edad y las circunstancias lo permitían). Si algunos ahora me critican por jugar con muñequitos, o imaginar que soy una orco, o una semielfa druida, ¿por qué no tener yo el derecho a criticar a los que piensan como si tuvieran quince años, cuando hace bastante que pasaron esa cifra?
¡Moríos de asco, malditos Süchtige gingivistas! Me gusta maquillar greguerías con mi lengua, enrevesar versos transversalmente cruzados que refieren a un externo elemento del texto cuya verdadera identidad ignoráis (o eso quiero haceros creer, o no). Creo un barroquismo ficticio con mis afiladas armas, y os pincho y me recreo con la mente, hasta que la legislación sufra un cambio radical, o hasta que nuestra discusión sobre cómo ocultar un cadáver llegue a algún acuerdo favorable.
Mientras, yo sonreiré desde mi sillón acolchado, sabedora de que ni juego al ajedrez ni acaricio un gato gris, sino que toco mis propios acordes en los hilos de Nona (o Cloto), hilos que no tiraré cual Rapunzel para salvaros, a no ser que lleven en su extremo un nudo de verdugo.
Cortesía de Boyer - Vip & Co; vv.aa.

Las leyes fundamentales de la estupidez humana (5 de Noviembre de 2008)


LAS LEYES FUNDAMENTALES DE LA ESTUPIDEZ HUMANA

La Primera Ley Fundamental: " Siempre es inevitablemente cada uno de nosotros subestima el número de individuos estúpidos que circulan por el mundo".

La Segunda Ley Fundamental: " La probabilidad de que una persona determinada sea estúpida es independiente de cualquier otra característica de la misma persona".

La Tercera Ley Fundamental: " Una persona estúpida es una persona que causa daño a otra o grupo de personas sin obtener, al mismo tiempo, un provecho para sí, o incluso obteniendo un perjuicio".

La Cuarta Ley Fundamental: " Las personas no estúpidas subestiman siempre el potencial nocivo de las personas estúpidas. Los no estúpidos, en especial, olvidan constantemente que en cualquier momento y lugar, y en cualquier circunstancia tratar y/o asociarse con individuos estúpidos se manifiesta infaliblemente como un costosísimo error".

La Quinta Ley Fundamental: " La persona estúpida es el tipo de persona más peligroso que existe. El estúpido es más peligroso que el malvado".

"Con la sonrisa en los labios, como si hiciese la cosa más natural del mundo, el estúpido aparecerá de improviso para echar a perder tus planes, destruir tu paz, complicarte la vida y el trabajo, hacerte perder dinero, tiempo, buen humor, apetito, productividad, y todo esto sin malicia, sin remordimientos y sin razón. Estúpidamente"

El Centro de Estudios Antropológicos Boyer - Vip, S.L., patrocinado por la Naziocracia y apoyado por el Mighty and Evil POMELO suplantador de personalidades de membrillos varios agradece los escritos a
http://www.personal.able.es/cm.perez/estupidezhumana.htm
*Extracto del space, a 5 de Noviembre de 2008.

Cuando la realidad supera a la ficción... (4 de Noviembre de 2008)

Últimamente hablo mucho sobre salud y bienestar, ya sea sobre la (falta de la) mía, o sobre la de otros, como voy a hacer hoy. Y es que hay veces en que la realidad supera a la ficción. ¿No os habéis preguntado nunca si alguien es tan tonto como aparenta? Pues sí, parece que es posible. ¡Y más aun!

Eso sí, apartad ahora de vuestras mentes sustancias tóxicas variadas que puedan propiciar (o acentuar) la estupidez humana. Os hablo de la profunda subnormalidad natural con que nacen algunos... no sé, pensaba decir humanos, pero digamos especímenes.

Porque está claro que tan tontos no pueden ser. Hay ciertas cuestiones que, hasta los perros, si se les enseña, aprenden. A saber:

Situación: perro muerde zapatilla;
Solución: amo pega perro y aleja zapatilla;
Resultado A: perro aprende y no muerde más zapatilla.
Resultado B ( en que el perro es un ejemplar más estúpido de lo normal): perro vuelve a morder zapatilla. Ver de nuevo la solución y repetir hasta que el perro aprenda.

Sin embargo, y como ya he dicho, en ocasiones el animal no responde a los estímulos del amo. En ese caso, cuando la situación se vuelve extrema, lo mejor es tomar medidas drásticas. No quiero que se me tome de extremista, nada más lejos de mi forma de pensar; pero si el susodicho reincide en el problema, siendo este de naturaleza más peligrosa, no queda - lamentablemente- más remedio que la solución más arriba mencionada: la aniquilación.

Este caso puede tomarse, también por extensión, al género humano (teniendo en cuenta las dudas ya mencionadas sobre la consideración "humana" de estos ejemplares). Llega un momento en la vida humana en que, dadas las circunstancias, se comienzan a perder físicamente las formas que diferencian a un ser como "niño o infante", para pasar a ser considerado un "adolescente". En teoría, y en paralelo a esta transformación, el intelecto del individuo debería también desarrollarse, o comenzar al menos su desarrollo.

He ahí el problema. En muchos, por no decir la mayoría, de los casos, este desarrollo intelectual no tiene lugar, quedando el ejemplar de homínido en un estadio intermedio entre la más absurda niñez y una supuesta adolescencia en que se permiten ciertos comportamientos, y hay que soportar ciertos otros. Por desgracia, las medidas en estos casos deben limitarse a la contemplación y estudio de los sujetos, dado que la solución arriba mencionada no es viable con el género humano (sin contar las nimiedades que se desprenden de la no consideración dentro de la raza humana de estos ejemplares).

Teniendo esto en cuenta, así como las experiencias de campo que, por asuntos de confidencialidad, no pueden ser (todavía) reveladas, habremos de concluir con una solución pacífica y paciente hasta que la legislación sufra un cambio radical, o hasta que nuestra discusión sobre cómo ocultar un cadáver llegue a algún acuerdo favorable. Hasta entonces, mantendremos la teoría de que ciertos individuos, en teoría pertenecientes a nuestra malhadada raza, son profundamente subnormales, sufren de un retraso considerable en su madurez y su capacidad de síntesis y comprensión, y la hipótesis de que, en efecto, pudieran ser parte de ese eslabón perdido que suponen algunos de los estudiosos anteriores.

Atentamente,

Centro de Estudios Antropológicos Boyer - Vip, S.L., patrocinado por la Naziocracia.


*Extracto del space, a 4 de Noviembre de 2008

Family is sacred (25 - 11 - 2008)

La familia es sagrada, dicen.

Pero ¿qué entienden por familia quienes de esto hablan? En principio el concepto familia era bastante más amplio respecto a lo que engloba hoy en día. En la primitiva familia romana entraba el cabeza de familia (llamado pater familias), podían entrar varias generaciones, y todos los esclavos. Incluso podían considerarse familia aquellos "socios" del pater familias que habían firmado con el un pacto de mecenazgo (no hablaremos aquí de la compleja trama de relaciones comerciales en la Roma antigua).

Una huella hoy en día de esta familia de la que hablamos la tenemos claramente en las mafias, y hablaremos de las italianas, porque las del este y demás no las conozco demasiado. No es que sea tampoco una experta en mafias italianas, ni mucho menos, no soy más que una neófita , pero sí sé que estas agrupaciones de personas se organizan en torno al capo (del latín caput, cabeza), que sería el equivalente al pater familias romano. Y a la familia no se la toca.

Tal vez por eso para mí es también amplio el concepto de familia. Pese a que el grado de consanguinidad te incluirá en el concepto moderno de familia, creo que es un status que se gana, con el que no se nace. Hay quienes entran de lleno en la familia aun sin ser parte natural de esta, y otros familiares que no pasarán del umbral de "cena de navidad/cumpleaños/aniversario/hola qué tal te va la vida".

Es una lástima, pero es lo que hay, aunque ya tomaré yo medidas para solucionarlo en su momento. Lo cual me lleva a la frase con que empezó todo. La familia es sagrada. ¿Que quiénes son para mí familia? Eso es un dato que no revelaré. Podrían hacerles daño, y hacérmelo a mí. Hay ciertas cosas que están claras, ciertas personas sobre las que no se tiene duda de que pertenezcan a ese círculo de protección que he extendido a mi alrededor; hay otras que no están tan claras, pero pueden deducirse o incluso figurarse. Sin embargo habrá siempre alguien que, por una u otra razón, permanezca en las sombras, y eso no lo revelaré.

Aun así, siguen y seguirán siendo sagrados, para mí y para otros. Sagrados e intocables. ¿Que qué quiero decir con ello? Es algo muy sencillo. Por mí y por las afrentas que a mí se hagan no me moveré, no necesariamente. Por ellos y por el daño que les hagan, sí lo haré. Me moveré y haré todo lo que considere necesario para protegerlos y vengar cuanto dolor se les cause.

De la vendetta, la venganza, no hablaré aquí, de la liberación que nos atrae, el desatar ese nudo que se contrae y a causa del que esta llega. Si se diera el caso, ya se hablaría de ella, de su placer y la necesidad de su perfección y belleza. Mientras tanto, solamente esto, que mi familia es también sagrada.

“Si hay algo seguro en esta vida, si la historia nos ha enseñado algo, es que se puede matar a cualquiera”.




*Extracto del space Silence in the night, y escrito el 25 de Noviembre de 2008.

sábado, 10 de enero de 2009

Cucu...

Mirar la alfombra verde del cuarto de baño y ver un perfil griego; depilarse con mantequilla (esto no lo he hecho yo); discutir sobre si te liarías contigo mismo, y llegar a la conclusión de que, si es solo sexo, sí, pero que no nos casaríamos con nosotras mismas; extender un gran montón de apuntes selectivamente por la cama para no caer en la tentación de echarte la siesta (esto sí lo hago yo); hacer zumo de naranja natural; ver trece (!) capítulos seguidos, intercalados con varios buscaminas; jugar al buscaminas solo con el color rojo; ganar al buscaminas (las que he perdido no cuentan, han sido 3); esperar que los trabajos se hagan solos; sonreír; ir a un italiano; cambiar el nombre de las cosas; tomar pastillas ( y no acordarte de si ya las has tomado...); sonreír; volver a sonreír; escribir tonterías; tener casi un idioma propio; no poder pensar en ciertas cosas sin mirar y sonreír (otra vez); ver películas; tener zapatillas de perritos.

O vacas.

Pero ya no tengo frío.

=)

In principium erat Verbum...

La vida es muy cruda; y, como la carne, puede tragarse sin masticar, con lo que se hace difícil de digerir, o puede cocinarse, trabajarse y disfrutar de ella. La decisión es tuya.

Yo, por mi parte, soy vegetariano.

He vuelto a empezar un blog. Primero voy a tranquilizaros (y a explayarme yo sola, que es a la única a quien le interesa): no voy a abandonar mi blog. Seguiré actualizando como siempre, a mi ritmo, con mis ciclos de historias, aunque ahora tengo menos tiempo que pelos, y seguiré escribiendo para vosotros.

Sin embargo, llega un momento en la vida de toda persona en que tiene que decidir si cargarse a alguien, o desahogarse de alguna otra manera. He prolongado esta situación durante demasiado tiempo, buscando alivios momentáneos que pudieran apartarme del crimen, pero ya no puedo más. Dado que las tonterías del space no me las lee nadie - quiero creer que por problemas técnicos -, voy a comenzar este blog que, como me han dicho ayer, sí, actualizaré bastante más a menudo que el otro.

No esperéis cuentos, historias, largos poemas épicos ni cosas por el estilo, para eso ya estoy en http://www.aguasdelleteo.blogspot.com para que paséis el rato. Aquí será distinto, pero espero que también me visitéis.

Sin más me despido, solo quería hacer una presentación (porque ya me he calmado...). Pronto volveremos con nuevas noticias, poemillas, nugae, pequeños relatos y prácticas varias. Sin más se despide, una loca más en este mundo.

viernes, 9 de enero de 2009

Horace, Liber Carminum III, 30


Exegi monumentum aere perennius
regalique situ pyramidum altius,
quod non imber edax, non Aquilo inpotens
possit diruere aut innumerabilis
annorum series et fuga temporum.
Non omnis moriar multaque pars mei
uitabit Libitinam; usque ego postera
crescam laude recens, dum Capitolium
scandet cum tacita uirgine pontifex.
Dicar, qua uiolens obstrepit Aufidus
et qua pauper aquae Daunus agrestium
regnauit populorum, ex humili potens
princeps Aeolium carmen ad Italos
deduxisse modos. Sume superbiam
quaesitam meritis et mihi Delphica
lauro cinge uolens, Melpomene, comam.